El cordobés es un símbolo de Los Gauchos, la Selección Argentina de Béisbol que participó en los Juegos Panamericanos de Lima. Después de una importante lesión, pudo volver a representar al país en Perú, para coronar una gran carrera.
Hablar de béisbol en Argentina es hablar del cordobés Federico Tanco. Con una importante trayectoria representando al país, disfruta de un momento de enorme felicidad al ser parte del plantel albiceleste que finalizó en el séptimo lugar en los Juegos Panamericanos de Lima.
Esta competencia no fue una más para Los Gauchos, denominación habitual de nuestra selección. Fue la primera vez en la historia que clasificaron por mérito deportivo, ya que sus antecedentes solo incluían a Buenos Aires 1951 y Mar del Plata 1995, por ser país organizador.
Cuando Argentina logró la histórica clasificación para Lima, saltaron las alarmas en Federico Tanco. Las lesiones lo perseguían y no solo que dudaba de sus chances de volver a ponerse la camiseta argentina, sino que no sabía si volvería a jugar oficialmente.
Dos operaciones en el codo derecho hubieran marcado el retiro de cualquiera en su situación. Sin embargo, no se entregó. Primero regresó a la actividad. Después, llegó el turno de otro retorno: la Selección. El sueño se cumplió y formó parte del equipo que terminó en el séptimo lugar en los Juegos Panamericanos.
Al finalizar el último partido ante Perú, casi de manera inevitable, la emoción le ganó, pero no le impidió analizar el camino recorrido: “Me voy muy contento. Es el primer Panamericano que puedo jugar. Estamos muy felices de haber clasificado por mérito propio. En la selección empecé en el año 2004. Siendo chiquito, fui a ver el Panamericano de 1995. Siempre soñé con estar y se me dio. Tengo una sonrisa de oreja a oreja desde el primer día”. Y agregó: “No puedo dejar de recordar todo lo que hice para estar acá después de una segunda operación y en toda la gente que me acompañó. A esta edad te duelen las articulaciones y los huesos, pero este es un deporte que cuando lo empezas a jugar, lo terminas amando”.
Su círculo empieza a cerrarse de la manera más acorde a tan destacada carrera: en la cancha y con su camiseta, la celeste y blanca número 22.
Además de Federico, otros seis jugadores cordobeses formaron parte del plantel en Lima: Miguel García, Eduardo Zurbriggen, Agustín Tissera, Federico Robles, Rodrigo Bruera y Agustín Tanco. También Eduardo Capdevila, integrante del cuerpo técnico.