Nació en Bell Ville, pero vive en Barcelona. Es uno de los dos cordobeses que participa en el torneo, junto a Juan Ignacio Londero, y disfruta jugar en su Provincia. Debutará en el cuadro principal ante el boliviano Hugo Dellien.
Con la diputa de la clasificación, el Córdoba Open ya está en marcha. Más allá de la expectativa que marca la presencia de Diego Schwartzman y de Guido Pella, el público cordobés sueña con otra hazaña como la de Juan Ignacio Londero el año pasado. El “Topo” tendrá un debut exigente ante el italiano Marco Cecchinato.
El otro crédito de la “docta” es el belvillense Pedro Cachín, que el año pasado llegó a cuartos de final (en la mejor actuación de su carrera), donde fue eliminado justamente por Londero.
Pese a que reside en Barcelona, Cachín decidió realizar su pretemporada en Villa María y recibió una invitación para participar nuevamente en el Córdoba Open.
Después del sorteo que determinó su enfrentamiento en primera ronda con el boliviano Hugo Dellien, Cachín reflexionó sobre sus sensaciones en la previa del comienzo del certamen: “Siempre que a uno le va bien en un torneo, se siente muy bien al volver. El año pasado yo tuve una gran actuación y me encanta regresar y, como es en casa, mucho más. Yo vivo afuera y estoy muy entusiasmado porque me hayan invitado y estoy con muchas ganas de jugar”.
Ubicado en el puesto 366 del ranking mundial, el belvillense recuerda lo que fue su mejor semana en el circuito: “Lo del año pasado superó las expectativas que tenía en ese momento y me fui sintiendo cada vez mejor a medida que avanzaba el torneo. Me frenó un jugador como el “Topo” que tiene muchísimo nivel y después se consagró campeón”.
En relación a este año, la expectativa es “ir partido a partido. Todos los encuentros son muy duros, hay jugadores de muy alto nivel. Me tocó Dellien que es un luchador por lo que seguramente será una linda batalla”
Sobre su análisis de la realización del Córdoba Open, dijo: “A mí me encantó el año pasado. Siempre el primer torneo que se hace en un lugar nuevo suele tener fallos y aciertos y este año se mejoraron muchos detalles que puedan haber surgido por falta de experiencia, como los vestuarios, la sala de jugadores y muchas cosas que a nosotros nos dan comodidad y nos agrada volver acá”. Y se despidió invitando al público al Kempes: “El Córdoba Open tiene mucho nivel y la gente que venga se va a llevar una gran impresión”.